Esta es una recopilación de algunas "malacrianzas" que he escrito y de algunas que escribiré durante los días y las noches que siguen. Perdonen las faltas de gramática, pero a los publicistas no nos enseñan esas cosas en la universidad. Ya me ocuparé yo de tomar los cursos respectivos. Espero que disfruten estas ocurrencias tanto como yo.

foto por James Christopher

miércoles, 19 de mayo de 2010

Reflexiones poco científicas sobre el Síndrome Pre -Menstrual.



"De vez en mes te haces artista,
dejando un cuadro impresionista
debajo del edredón.
De vez en mes con tu acuarela,
pintas girones de ciruela
que van a dar hasta el colchón.
De vez en mes no hay quien te aguante,
y es un pecado estar distante
y otro peor quedarme ahí.
y aunque hay receso obligatorio,
y el cielo se hace un purgatorio
te amo más, de vez en mes."
Ricardo Arjona.

Antes de que puedan pensar lo contrario, debo aclarar que el hecho de citar a Ricardito no significa que sea fan de sus hinchados versos y mucho menos de esa exótica mezcla entre Rambo centroamericano y poeta rehabilitado con la que, increíblemente, logra conquistar a millones de mujeres.
A Ricardito lo he traído a colación por dos razones: la primera, porque su canción es perfecta para ilustrar el tema de hoy y la segunda, porque siento un sarnoso placer cada vez que pienso en un hombre escribiéndole una canción a la menstruación (es una porquería sólo comparable con una Oda al Semen o algo así. ¿Se imaginan lo que podría llegar a decir?). Digamos que el concepto de la menstruación es lindo, pero por Dios, ¡todo lo que se deriva de ella no puede ser objeto de inspiración! Ay Ricardito, qué enfermo, qué entrometido, qué gran sapo eres jesúmariayjosé! Al universo le sobran tus palabras, las mujeres sabemos que no somos cosa apetecible cuando sangramos, así que por favor, no trates de llevar la contraria... y también haz el deber de conseguirte una novia más higiénica, dile que las Kotex también se usan para dormir, así no tienes que seguir delirando sobre colchones manchados.

Por más tentador que rusulte seguir hablando de Arjona, volvamos a lo nuestro.

Para empezar, convengamos que las siglas S.P.M. corresponden al término médico "Síndrome Pre - Menstrual"... ¿lindo no?
Los médicos dicen que cada mes, unos días antes del periodo, las mujeres experimentamos cambios hormonales que nos causan alteraciones en el genio. Todo esto es cierto y aburridamente comprobado. Pero vamos, es claro que lo más divertido del S.P.M. está más cerca de nuestro entendimiento que la química cerebral. Hay que quitarle la bata blanca al asunto para verlo en toda su simpleza, en toda su naturalidad y sobre todo, en toda su malparidez.

Ya que no somos médicos (thank God) aprovechemos para hablar sobre el S.P.M. sin más fundamento que la experiencia.

Como buena hembra atropellada mensualmente por la propia naturaleza, quiero decir que a mí me gusta el S.P.M.
Creo que las mujeres sufrimos mucho tratando de apaciguar la despampanante fiera que nos gobierna, así que cuando la naturaleza da permiso de soltarla y el universo está dispuesto a indultar cada una de sus fechorías, no hay nada más sensato que disfrutarlo.
Es que ser una malparida con licencia se siente demasiado bien, ser insoportable con permiso es en verdad ganarle a la vida.
Es tan bueno, que podemos disparar ráfagas de silencio paralizante, escupir acidez por los poros, bombardear la ciudad con miradas displicentes y ser simplemente hijuemadres al nivel que nos plazca ¿y quién nos va a decir que no?, nadie, ¡tenemos permiso! y aún más que eso, las leyes divinas de no sé qué monte sagrado y las teorías azarosas de la biología dicen que las cosas TIENEN que ser así, que las mujeres somos incondicinalmente malcriadas.

¡Por fin Dios y Darwin se ponen de acuerdo!

Diariamente los hombres (y algunas mujeres freaks of nature que no padecen los síntomas) se empecinan en entender qué carajos nos pasa durante los días del S.P.M. y quieren escuchar razones coherentes que justifiquen nuestras ariscas maneras. Pero encontrar un argumento razonable (diferente de la explicación científica) para la histeria femenina es más inutil aún que los realities de Paris Hilton.
Los hombres se la pasan horas burlándose de nosotras con sus compañeritos de Play Station, y hablan de nuestro extraño comportamiento, dicen no nos entienden; nos dicen bipolares, histéricas, regludas. Y claro, lo más difícil de entender siempre es lo más evidente. Lo que los hombres no entienden de la regla es precisamente que NO HAY NADA QUE ENTENDER.
La naturaleza es tirana queridos hermanos, bajo sus leyes todo funciona PORQUE SÍ.

Si hay algo que moleste a los hombres, es que uno les responda NO SÉ. Pero ¿qué quieren?, que les digamos, "mira, mi vida, es que durante el periodo denominado S.P.M. las hormonas de mi cuerpo se alborotan haciendo que mi genio sea aún más cambiante de lo normal?" Ni en The Big Bang Theory.

¿Cuál es tu problema conmigo? NO SÉ Y PUNTO.

En vez de dar tanta cantaleta los hombres deberían sacar provecho de nuestro S.P.M. Por ejemplo, podrían pedirnos que insultemos al que les rompió el tobillo jugando fútbol, al fin y al cabo el desgraciado no va a pegarle a una mujer. Podrían ponernos al teléfono con el servicio al cliente del operador de cable y tendrían de inmediato el arreglo en la señal, o podrían zafarse de la cita con el urólogo , argumentando que deben cuidar de su novia "indispuesta".

Es cuestión de ver el asunto con otros ojos, no hasta el punto de idolatrar la menstruación como el patético de Ricardito, pero sí hasta el punto de hacer más fácil la cuota mensual de convivencia.

Ya que no soy médica aprovecho para rebautizar el término "Síndrome Pre - Menstrual", quiero revestirlo de carne y hueso, para que se convierta en algo más elemental y respetable:

S
imple y. Pura. Malparidez.